A finales de 1944, con la guerra en Europa casi decidida, Churchill
insistió en enviar a la Royal Navy a luchar junto a los americanos en la
última fase de la guerra contra Japón. El ofrecimiento se hizo en la
segunda conferencia de Quebec, y los americanos aceptaron sin demasiados
problemas. Politicamente les convenía para no dar la impresión de que ellos eran los únicos
en morir en la lucha contra Japón. El Almirante King inpusó una curiosa
condición: los británicos deberían ser independientes en logística,
aunque en la práctica nunca fue así.
Churchill hizo este
ofrecimiento por razones políticas. Tras la guerra esperaba restaurar la
posición británica en los territorios del imperio, y si no se
participaba el efecto en el prestigio británico sería notable. Hasta
bien entrado 1944 la Royal Navy se había dedicado a realizar pequeñas
incursiones en Malaya o Indias holandesas, con un efecto nulo si se
compara a las batallas aeronavales entre japoneses y americanos.
HMS King George V (naval-history.net).
Con
el objetivo de colaborar en la lucha se crearía la British Pacific
Fleet, creada a partir de British East Indies Fleet, heredera de la
Eastern Fleet. Los americanos la denominarían TF 57 cuando operó bajo la
quinta flota, y TF 37, cuando los hizo bajo la tercerca. En marzo de
1945 los navíos eran los siguientes, si bien éstos variarían con los
meses ya que hubo que retirar barcos por razones de mantenimiento.
- 1° Escuadrón de acorazados: King George V, Howe
- 1° Escuadrón de portaviones: Indomitable, Victorious, Illustrious, Indefatigable
- 4° Escuadrón de Cruceros: Swiftsure, Argonaut, Black Prince, Euryalus, HMNZS Gambia
- 4° Flotilla de destructores: Quickmatch, Quiberon, Queen-borough, Quality
- 25° Flotilla de destructores: Grenville, Ulster, Undine, Urania, Undaunted, Ursa, Ulysses, Urchin
- 27° Flotilla de destructores: Kempenfelt, Wager, Wakeful, Wessex, Whelp, Whirlwind
- Destroyer Depot Ship: Tyne
La
fuerza teórica era impresionante, de hecho era la flota más potente
creada por la Royal Navy, pero en 1945 la flota -que había dominado los
mares desde 1805- estaba como su patria: agotada. Muchos de los barcos
llevaban combatiendo desde 1939 sin casi respiro, y las exigencias del
Pacífico eran muy diferentes comparadas a la del Atlántico. La flota de
suministro, conocida como Fleet Train o TF 113, tenía muchas
deficiencias, sobre todo en buques cisterna. Esto causó algún que otro
sonrojo, ya que mientras la US Navy conseguía reabastecer un portaviones
en 2 horas, la Royal Navy podía tardar 1 día. Sus portaviones llevaban
muchos menos aviones y se dependía de modelos americanos, ya que los
Seafire tenían un alcance escaso para el teatro, y eran complicados de
operar.
HMS Ilustrious (http://www.fleetairarmarchive.net/)
Para
dar un ejemplo, en Okinawa la Quinta Flota la US Navy operaba 86 navios
(15 portaviones) con 919 aviones; los británicos 29 (4 portaviones) y
244 aviones. En general la British Pacific Fleet se dedicaría a apoyar
el avance de los americanos, operando en 3 grandes campañas:
- 26 de marzo al 20 de abril: Invasión de Okinawa bajo el código Operación Iceberg.
- 4 al 25 de mayo: invasión y combates en Okinawa.
- 7 de julio hasta el final de la guerra: Operaciones en Japón frente a los restos de la marina japonesa.
Desde
el principio hubo muchos problemas, tanto materiales como morales. En
1945 hubo retrasos debido a la actitud de los sindicatos en el puerto de
Sidney, donde estaba basada la flota. Canadá retiró su personal en
mayo de 1945, dejando sólo a los que quisiesen servir como voluntarios.
Esto casi deja al crucero Uganda sin tripulación, y a duras penas se
logró convencerlos para que por lo menos esperasen a sus remplazos. Los
barcos no estaban adaptados a condiciones tropicales y había muchos
accidentes: en los primeros ataques se perdieron 42 aviones en 378
salidas, algo a lo que ni el Bomber Command había llegado en sus peores
días. En muchos casos la mayoría de las pérdidas se producían tras
accidentes: en los primeros 12 días de ataque se perdieron 19 aviones
por Flak y 28 en accidentes.
El único consuelo de los británicos
era la protección de sus portaviones, muy superior a la de los
americanos al contar con una cubierta acorazada. A pesar de todo, ésto
no era suficiente, y los americanos se querían librar de la flota, que a
duras penas podía seguir el ritmo de sus navíos. El Almirante King
intentó enviarla a apoyar los desembarcos en Borneo, pero la actuación
de los británicos al más alto nivel diplomático lo evitó. En cambio,
nada frenaría los problemas mecánicos, de suministro y moral: en mayo de
1945, la flota comandada por Rawlings tuvo que retirarse para realizar
labores de mantenimiento y suministro. En ese periodo se había realizado
sólo 11 ataques aéreos, lanzando 546 toneladas de bombas y 632 cohetes.
En total se reclamaron 52 aviones enemigos destruidos. Las pérdidas
fueron 203 aviones encuadrados en las siguientes categorías
- 32 en ataques suicidas.
- 30 en incendios en los hangares.
- 33 derribados por flak o cazas enemigos.
- 61 en accidentes en la cubierta de vuelo.
- 47 debido a otras causas.
Con
estos resultados no es de extrañar que la British Pacific Fleet fuese
conocida en la posguerra como la Forgotten Fleet. Su envío no pudo parar
el proceso de descolonización, y Churchill, su principal valedor,
perdió las elecciones de 1945 frente a Clement Attlee.
Fuentes y enlaces de interés:
- Nemesis: The Battle for Japan, 1944-45 , de Max Hastings (2007).
-
http://www.fleetairarmoa.org/
-
http://www.nzetc.org/tm/scholarly/tei-WH2Navy-c24.html
-
http://www.dtic.mil/doctrine/jel/jfq_pubs/4017.pdf
-
http://en.wikipedia.org/wiki/British_Pacific_Fleet